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CALAVERAS
Y DIABLITOS
Por.
LCFB
Si bien es cierto que en
los estados en donde más fortalecida está la CNTE (Chiapas, Oaxaca, Michoacán y
Guerrero) son las entidades con menor nivel educativo y con mayor índice de
analfabetismo, ¿por qué nadie cuestiona el magro apoyo que estos estados tienen
en el rubro educativo?
Esta
quincena comienzan las vacaciones de verano, el periodo más largo de días de
asueto para la los alumnos de educación básica de todo el país; sin embargo, la
ciudadanía, la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación y
autoridades educativas seguirán en un laberinto.
El
tema de la Reforma Educativa, seguramente, en estos días continuará ocasionando
bloqueos o marchas por parte de la CNTE, lo que repercute en diversas
afectaciones que van desde un retraso para llegar a cumplir compromisos hasta
pérdidas económicas de diferente índole.
Con
certeza veremos que las negociaciones serán lentas, que de ambos lados las
condiciones del dialogo cambiaran conformen aparezca una propuesta del de
enfrente y que con pobreza de diálogo y acciones se alargara, porque lo mejor
es apostar a un desgaste (de alguna de las partes) o dejarlo al azar para que
se solucione de una manera mágica.
En
cada lado existen argumentos pero en estos días es necesario preguntarles lo
siguiente con el fin de entenderlos mejor: si como dicen la Reforma Educativa
no es una Reforma Laboral y al mismo tiempo lo único que busca es un
diagnóstico certero, a nivel nacional, de cómo el profesorado atiende a los
menores ¿por qué aún la SEP no ha dicho cuándo los profesores y profesoras de
las escuelas privadas acudirán a su examen de evaluación?, porque al fin y al
cabo estas instituciones tienen un porcentaje de representatividad en el
Sistema Educativo Nacional, de lo contrario su comunidad estudiantil no hubiera
presentado evaluaciones como el propio Enlace.
Si
bien es cierto que en los estados en donde más fortalecida está la CNTE
(Chiapas, Oaxaca, Michoacán y Guerrero) son las entidades con menor nivel
educativo y con mayor índice de analfabetismo, ¿por qué nadie cuestiona el
magro apoyo que estos estados tienen en el rubro educativo?
¿Cuántos
de esos niños llegan a sus aulas sin desayunar o después de caminar uno, dos o
hasta 10 kilómetros?, ¿Esas circunstancias de quién son responsabilidad?.
También
es cierto, que de cada 100 pesos destinados para la educación 93 se van a
salarios o pagos de nómina, entonces ¿dónde se queda esa monumental cantidad de
dinero y no llega al profesor de pie? o
¿es necesario suspender labores y completar casi una década en la cual no se ha
podido vivir un ciclo escolar tal y como lo dicta el calendario oficial?,
porque el resumen es una niñez sin clases que no tiene maestros, ni aulas, ni
condiciones para poder aprender.
En
conclusión, para los involucrados estos días ya no son vacaciones porque al
final han pasado tantos días fuera del aula (y pecando de ignorancia desde su
esquina política o de dirigencia) que ya es una tradición que parece no
importarles, y que está marcando a una generación que no termina por conocer el
significado de una educación de calidad y gratuita.
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